En la pasada edición de los premios lux 2015, dos de las cuatro imágenes que presenté quedaron finalistas, produciéndome un subidón moral y un agradable cosquilleo de estómago, que comparto con vosotros.
Aprovecho para agradecer a la Asociación de fotógrafos profesionales de España su continuo esfuerzo por defender, dignificar, dar a conocer y prestigiar esta profesión.
También felicitar a los ganadores de ese año, a los finalistas y sobre todo al conjunto de participantes que, son los que de verdad, hacen que los Premios Lux sean cada vez más importantes.